13 July 2015

GRABADOS Y TATUAJES


La naturaleza está siempre presente en arquitectura, no hace falta dibujarla. En palabras de Alejandro de la Sota: "La arquitectura puede acercarse a la naturaleza, puede ponerse enfrente, no puede olvidarla" (1). A lo largo de la historia, el convenio entre arquitectura y paisaje ha dado lugar a numerosas analogías e identificaciones, desde los grabados de la flor de loto en el capitel egipcio o la hoja de acanto en el corintio, hasta las damasquinas en cerámica o las hojas de palmera moldeadas por Antonio Gaudí en la cerrajería de la Casa Vicens. De la abstracción más recalcitrante a la voluptuosa naturalización de la arquitectura. 

6 July 2015

HABITANTES DEL DIBUJO


El dibujo supone quizá la más valiosa herramienta para ver, no solo mirar, arquitectura. El registro cinematográfico del ojo, nuestra visión en movimiento, nuestro tempo, oculta con frecuencia aspectos esenciales de todo lo que nos rodea, pliegues de lo visible tan solo evidentes bajo ciertas condiciones de atención y pertenencia al lugar (1). El placer de dibujar un rostro, una ciudad o un paisaje, nos ralentiza y nos invita a explorar desde la mirada, apresurada como anda ante la falta de tiempo, distraída por la nube de imágenes que se deslizan como papeles sobre el agua de nuestras pantallas retro-iluminadas.